miércoles, 28 de enero de 2015

Sustantivos y verbos



Es de notar que cuando llueve los colores se hacen más intensos.
Claro que para decir lo que acabo de decir hay que partir de la certeza de que los colores tienen una sustancia, que puede hacerse más o menos intensa.
¿Cuál sería el color sustancial?
¿El verdadero verde de ese árbol es este, mojado, o el seco?
Para decir "cuando llueve los colores se hacen más intensos" hay que partir de un verde base. ¿Por qué el verde base es el seco, y no el mojado?
Algo parecido podría decirse de ese verde en la oscuridad o bajo el sol. Etcétera.
Quizás no hay un verde, sino muchos, infinitos, verdes. Verde a la noche sin luna, con luna, iluminado instantáneamente por los faros de un auto, verde en un día nublado, iluminado por el primer sol de la mañana, etc.
Esto tiene algo de insoportable. Necesitamos que el verde sea el verde.
Tenemos una dependencia desesperada de la sustancia.
No soportamos un mundo sin sustantivos.
Un papá debe ser un Papá, un totem, alguien incólumne. Y sin embargo, un papá sólo es papá cuando actúa o es actuado como papá.
Papá es un verbo.
Verde es un verbo.
Desde que la realidad es un flujo, desde que ocurre en el tiempo, no hay sustantivos, sino verbos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario